Este proceso de transición energética implica, entre otros proyectos, los de Energía Distribuida, es decir la generación y gestión de energía eléctrica de forma descentralizada, lo más cerca posible de su lugar de consumo a través de fuentes de energía renovable (solar, eólica, biomasa, biogás, u otros). Sus principales beneficios son la reducción de pérdidas en la red, al reducir los flujos de energía por la misma.
Un ejemplo es el Sistema Fotovoltaico Nave Cultural, desarrollado en conjunto con la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza y la Universidad Tecnológica Nacional FRM, Grupo Cliope Energía, Ambiente y Desarrollo Sustentable. La primera etapa comprendió un sistema fotovoltaico de 46,7 kW instalados en el techo de la edificación, con su ampliación realizada en el 2020 pone a disposición más 100 kW. Así, la Nave Cultural se convierte en el ícono de la instalación de Generación Distribuida de mayor potencia de la capital mendocina y el de mayor potencia instalada en un edificio público en todo el territorio de la Provincia de Mendoza.